La continuación de "La reina roja" intensifica la guerra entre el ejército rebelde y el mundo dividido por el color de la sangre que los Rojos siempre han conocido. La sangre de Mare Barrow es roja (el color de la gente común), pero sus habilidades son plateadas. Mare se ve abocada a una encrucijada mortal en la que corre el riesgo de convertirse en la clase de monstruo que quiere vencer.